La pastilla abortiva comercializada bajo la marca Pfizer es un fármaco seguro, cuyo componente activo es el Misoprostol análogo semisintético de la hormona prostaglandina.
La OMS (Organización Mundial de la Salud) lo considera el fármaco más recomendado a la hora de practicar un aborto médico, por su baja mortalidad asociada a este medicamento.
El misoprostol causa contracciones en el útero, estas contracciones provocan la caída del tejido formado, muy parecido a lo que ocurre en el aborto espontáneo.
Después de esto el misoprostol produce la expulsión de todo el contenido uterino.
El misoprostol tiene una tasa alta de efectividad y funciona mejor en etapas tempranas del embarazo.
Debe dejarse la pastilla debajo de la lengua durante 30 minutos y luego tragarlas.
Debe recostarse y colocar la pastilla entre tus dedos índices y anular e introducirlos en la vagina empujando hacia dentro como si te estuvieras poniendo un tampon. Sigue el mismo procedimiento para cada pastilla, lo más profundo que sea posible.
